jueves, 14 de junio de 2018

Análisis The Last Of Us Part II

La mirada de Elllie -protagonista y personaje controlable en esta ocasión-, los sentimientos que transmite con el gesto más pequeño y ver como se sonrojaba con un sencillo baile nos resultó conmovedor. Aún más si lo colocamos en contraste con las frases de infiltración y los enfrentamientos. Según sus creadores, la escena de la iglesia tiene lugar cuatro años después de los sucesos del primer The Last Of Us, mientras que la parte jugáble sucede cinco años después. Pues bien, en el primer día del E3, hemos podido ver de nuevo la demo, a puerta cerrada y bajo la atenta mirada del director del juego.

Evidentemente las situaciones eran las mismas, pero todo se vuelve un poco más impactante cuando ves que se trata de juego real, que no es un vídeo retocado para la ocasión. Y allí, junto a nosotros estaba un miembro de Naughty Dog controlando a Ellie (en una estación de desarrollo, no en la consola final).

Los cambios respecto al gameplay de The Last Of Us 2 que abrió la coferencia de Sony en la E3 han sido muy sutiles, sobre todo en lo relacionado al combate. El encargado de la demo ha seguido paso a paso el mismo recorrido que en el tráilers, pero no ha tenido la misma puntería que ayer con el arco ni con la pistola de 9mm. Y eso nos ha permitido ver acciones más viscerales en el cuerpo a cuerpo.








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